Orinoco Flow, la magia de un poderoso río melódico

“Orinoco Flow” es música que mueve las emociones, su melodía es un rocío que refresca bajo la suave voz que guía el recorrido, es magia colocada sobre un pentagrama que te embarca en los más cautivantes escenarios donde recorren las fuertes aguas de nuestro “Padre Río”, navegando  sobre sus inquietas corrientes, mientras se ve el cielo abierto, el hermoso infinito. La cantante y compositora “Enya” es la responsable de darle vida a esta magnífica mezcla de sonidos que abre un mundo que hasta los sueños se le hace difícil dibujar.

En octubre de 1988 “Enya”  lanza su segundo álbum formal como solista, “Orinoco Flow” fue su gran éxito, las principales estaciones de radio se encargaron de sonar esta canción, ubicándola rápidamente en un lugar del que difícilmente bajaría. En el momento en que escuché esta pieza por primera vez me hizó hacerme varias preguntas ¿Quién es la que joven que interpreta de manera tan melódica esta canción sobre el Orinoco? ¿Tendrá alguna relación con Venezuela? La respuesta es que no se trata de una venezolana, ni siquiera de una americana. Enya es una irlandesa, nacida en Donegal el 17 de mayo de 1961, y cuyo nombre completo es Eithne Patricia Ní Bhraonáin.

Su carrera musical comenzó en el año de 1979 con la agrupación “Clannad”, pero solo fue en el año de 1988 cuando esta angelical voz alcanzó el reconocimiento mundial por su álbum “Watermark”, vendiendo más de ocho millones de copias y alcanzando el primer puesto en varios países. “Orinoco Flow” fue la encargada de abrirle las puertas de la gloria, un sencillo que llegó el número uno en el Reino Unido. El álbum cuenta  con canciones interpretadas en latín y gaélico (su lengua materna), es de destacar las piezas “Cursum Perficio” y “Storms in Africa”.

Orinoco Flow o Sail Away como se le conoce por su estribillo, es una pieza en la cual relata sobre una embarcación que navega sobre las aguas del “Río Orinoco”, al menos es lo que uno cree entender de su letra “llévame en las ondas a las tierras que nunca he estado, llévame en las ondas a las tierras que nunca he visto… déjame navegar sobre el flujo del Orinoco”, así Enya permite que su pieza musical vaya pincelando con acuarela las aguas dulces que dejaron impactados a los conquistadores, ver el inmenso ancho del río, y la fuerza de sus espumas blancas empujando al Atlántico.

Sin embargo, existen varios documentos donde la pincesa celta «Enya» menciona que el título del tema fue tomado del estudio de grabación «Orinoco Studios» de Londres, donde su colaborar, Nicky Ryan, creó todo un mundo de sonidos que se pueden oír en  “Watermark”.

Si bien es cierto que este tema pudo ser obra de la casualidad y nació por el nombre de un estudio de grabación, su letra es un viaje profundo, sobre un río del mundo, sobre el Orinoco, que va subiendo desde el sur para girar al este justo después de recibir las turbias aguas de Apure, el mismo Padre Río que recibe en su cauce al Caura y al Caroní, para despedirse con toda su furia en el Océano Atlántico, ese que separa las tierras Sudamericanas del Viejo continente donde Enya grabó este disco.

Esta es la pieza que inmortalizó a la cantante irlandesa, desde su castillo logró que fluyera sus blancas energías y le ha dado a nuestro caudaloso río una historia musical, sin haber sido el objeto de la composición, la misma te puede trasladarte por tierras venezolanas. Puedes intentarlo, cierra los ojos, escucha la melodía y déjate llevar por los fascinantes escenarios del Amazonas y del macizo Guayanes.

Imagen tomada de www.panoramio.com, de Viajero22.

10 respuestas a «Orinoco Flow, la magia de un poderoso río melódico»

    1. Muchas gracias por escribir. En una oportunidad buscando fotografías a través de Google, y que estuviera libre de derechos de autor encontré esa belleza. Si me autorizas me gustaría seguir usandola, eso sí, colocando tus datos como autor de la misma.

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      1. Te autorizo a seguir usando las fotografías que subí a Panoramio. Yo las subí para que todo el mundo las pudiese disfrutar, con la idea de que al geolocalizarlas ayudara a los viajeros para decidir sus recorridos. Cuando Google cerró Panoramio, no migré a la nueva plataforma, con lo cual ya sólo puedo encontrarlas en algún viejo disco duro y en los contados casos que mantenéis publicaciones vivas donde están insertadas mencionando aquel nick tan genérico. Ahora lamento no haberlas firmado con mi nombre. Te voy a contar la historia de esa foto. Entre Isla Margarita y Canaima, me alojé un par de noches en unos palafitos en un lateral del río Orinoco; el tripulante de la lancha paró diez minutos cuando volvíamos para que pudiéramos disfrutar del atardecer desde mitad del río. Disfruté de un hermoso momento de paz y belleza, prueba de ello es que sólo hice tres o cuatro fotos en las que se ve el cambio de colores en el atardecer. Esta es la que más me gustó.

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      2. Muchas gracias en verdad. La fotografía es hermosa, captura esa magia única que tiene el Orinoco. Tuve la oportunidad de viajar por el Estado Amazonas, y cuento con unas fotografías que me gustan mucho pero que debo mandar a digitalizar los negativos, porque para ese momento aun usaba cámara analógica. Sería interesante conocer esas experiencias, la oportunidad de recorrer al Padre Río no la tiene todo el mundo.

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